Variedad bífera, con producción de brevas poco importante en comparación con la de higos. Vigorosa, de porte semiabierto y poco ramificada. La breva es piriforme, con pedúnculo de tamaño medio, que se desprende con cierta dificultad de la rama, y el ostiolo abierto. La piel, a pesar de ser delgada, tiene buena consistencia; es de color verde manzana con punteado blanco y aristas longitudinales que toman coloración negruzca cuando el fruto se aproxima a la madurez en el árbol y se intensifica a medida que pasa el tiempo después de cortado. La pulpa es fina, dulce, de color miel claro, y tanto ésta como el receptáculo se torna violeta cuando al ser partida entra en contacto con el aire.
El periodo de maduración de la breva se sitúa entre finales de junio y la primera decena de julio. El higo tiene forma esférica, con pedúnculo grueso y muy corto que se desprende fácilmente de la madera y el ostiolo abierto. La piel es gruesa y resistente, de color verde con tonalidades amarillentas y punteado blanco. La pulpa es fina, de color ambar con una leve tonalidad rosa. Los aquenios son más bien pequeños, muy numerosos y rellenan completamente el receptáculo.
El periodo de recolección del higo abarca de primeros de agosto a mediados de septiembre, situándose la máxima producción hacia mediados de agosto. Los crecimientos del año de esta variedad tienen generalmente entrenudos cortos, lo que unido a que muy frecuentemente se desarrollan dos o más frutos juntos, hacen que presenten a veces aspecto de racimo. Esta variedad que presenta una buena calidad en sus frutos, sobre todo en los higos, incluido un buen tamaño, tanto para consumo en fresco como para secado, cuando las condiciones de cultivo, fundamentalmente el clima, son adecuadas, ve reducida la misma, especialmente por importante disminución del calibre, cuando las condiciones de cultivo cambian a rigurosos secanos.